“Si Sarmiento volviera a la vida -imagina Diego Herrera- tendría serias dificultades para comprender qué rol cumplen tutores, asesores pedagógicos, facilitadores pedagógicos digitales, promotores de la educación o referentes de alumnas madres. Se encontraría perdido en un mundo de siglas escurridizas: el DOE (Departamento de Orientación Educativa), ACP (ayudante de clases prácticas) o APND (acompañantes personales no docentes). (…) ¿En qué momento ya no alcanzan maestros, profesores, directores, inspectores, preceptores y secretarios? ¿Qué otros roles empezaron a gravitar en las escuelas y los jardines de infantes? ¿Hay claridad sobre su importancia? ¿Tienen algún reconocimiento social? ¿Quiénes saben para qué están allí?”.
Opiniones de:
Diego Herrera (Licenciado en Ciencias de la Comunicación e integrante del equipo editorial de la UNIPE), Roxana Méndez (directora de Inclusión Educativa, Educación Especial y Asistencia Técnica de la Provincia de Río Negro), Alejandra Risso y Javier Medina (promotores escolares), Andrea Bedini (directora de la Escuela Primaria N° 2 de Carlos Casares – PBA), Manuel Ovando (estudiante de quinto año y vocero del Centro de Estudiantes de la Escuela Normal Superior Lenguas Vivas – CABA), Cecilia Veleda (directora ejecutiva del Instituto Nacional de Formación Docente), Patricia Ledesma (docente del Jardín de Infantes N° 905 de Magdalena – PBA), Liliana Bortnik (ex asesora pedagógica y ex coordinadora de asesores pedagógicos de escuelas públicas de la CABA), Mabel Boeykens (vicedirectora del turno vespertino de la Escuela de Educación Secundaria N° 7 de Monte Grande – PBA), Sofía Luppino (la facilitadora pedagógica digital), Adriana Serrudo (coordinadora nacional de la Modalidad de Educación Intercultural Bilingüe entre 2009 y 2012).